Uno de los campos de aplicación del zincado electrolítico en Huelva, aunque se trate de un ámbito muy desconocido, es el galvanizado de armaduras de hormigón armado.
En principio, el hormigón armado se fabrica para que sus armaduras no estén sometidas a corrosión, pero esto, en determinadas ocasiones, es muy difícil de conseguir. Por ejemplo, en construcciones marítimas, en las que el hormigón armado está en contacto directo con el agua del mar, es relativamente sencillo que los cloruros presentes en el agua salina consigan migrar hasta las armaduras y corroerlas.
Mediante la aplicación del zincado electrolítico en Huelva evitamos estos problemas de corrosión en las armaduras y la consecuente pérdida de la capacidad estructural de la construcción de hormigón armado.
Para hacernos una idea de la magnitud del problema de la corrosión del acero del hormigón, vamos a realizar el siguiente ejercicio. Supongamos una viga de hormigón armado apoyada en dos puntos. Toma nota: las tracciones son resistidas por el acero. Esto quiere decir que, si situamos un peso en la mitad de la viga, la parte inferior de esta estará traccionada y dicha tracción la resistirá el acero. Si este acero se ha corroído y no tiene la sección resistente necesaria para resistir dicha tensión, el acero se romperá y, por consiguiente, la viga se caerá.
Mediante las armaduras de acero galvanizado en caliente se previenen los problemas de corrosión en ambientes excepcionalmente agresivos. Esto es debido a que el umbral de concentración de iones (iones de cloruro) que son necesarios para corroer el acero es mucho mayor en el caso del acero galvanizado que en el del acero sin galvanizar. Sin tener en cuenta que, además, la velocidad de corrosión también es menor en el caso del acero galvanizado.
En Industria Sevillana del Zinc somos especialistas en galvanizado electrolítico.